Recibí a la luz, directo a los ojos
Y aunque yo no podía hablar,
Ella supo que yo ya estaba preparado
Estaba listo para la confrontación...
He caído tantas veces que no recuerdo el número
No se en cuantas ocasiones corté mis rodillas
Cuantos pantalones manché y rompí en el proceso
Pero Aprendí a caminar sin poner rótula en tierra
Lo mas importante de entender la gravedad
Fue comprender como levantarme y seguir
Lo mas importante de saber a Murphy
Fue aprender a escupirle en la cara.
Soy esbirro de la pluma y la guardo con mi espada
Me volví un destructor de cadenas mentales
Me desplazo con el viento contenido en mis palabras
Y me refugio de la tormenta en mis valores e ideales
No creo en guerras malvivientes que desgarran mi espíritu
Tampoco creo en palabras fundamentadas en las cenizas
No doy batalla al desvalido ni la espalda al poderoso
Pero no menoscabo en enseñanzas si se me da la oportunidad.
No soy mejor que alguno, pues en esencia somos iguales
No tengo poderes o capacidades superiores
No soy el mejor en algo, pero soy bueno en todo lo que hago
Porque lo hago con el empeño propio del amor que le imprimo
Soy exigente con otros, porque soy dictatorial conmigo
Y ello no corroe la pureza de mis intenciones positivas
Soy constructor y fuerza transformadora de la vida
Diseñador y escultor del pensamiento.
Creo en el amor como el combustible de la existencia
Y es que a mi parecer, basta con ver alrededor
Pues todo se compone de un equilibrio imperecedero
Que por mas que nos esforcemos, no podemos alterar
Creo en la soledad como la otra cara de la moneda
Necesaria para moldear nuestro espíritu
Nos enseña a sobrellevar y aceptar los ciclos universales
Pero sobre todo a sobrellevar y aceptarnos como individuos.
Soy bote a reparar y herramienta reparadora
Navegando por este cuadro estático que se expone al demiurgo
Vivo estudiando a la improvisación
Existo aprendiendo a planificar
Ando forjando mi tiempo con el martillo de mis decisiones
Soy mi demonio y salvador, pues soy responsable de lo que vivo
Soy conciencia a ojos abiertos e inconsciencia en pestañeos
Y soy el único que estará conmigo hasta el final.
Cada día existo en esta confrontación
Y ella sabe que estoy preparado
Pues cuando ella llegue, yo no podré hablar
Pero estoy listo para recibir la luz directo a los ojos...
visita semanal
sábado, 28 de enero de 2012
jueves, 19 de enero de 2012
Ojo 03: Idea
Ser.
Estar.
Parecer.
Una amalgama de realidades se conjugan en este espacio.
Acá soy yo en una de mis más puras expresiones.
En esta dimensión intangible siempre estás para mi.
En forma de recuerdos, de ideas, de fantasías.
Una purga de impresiones se amasa y se mantiene.
En mi hago historia.
Soy un escultor de la neblina.
En sueños y despierto, siempre soy.
Desde el blanco hasta el negro y pasando por todos los tonos del gris.
Formas, colores, memorias y aprendizajes.
El ayer, el hoy y una idea del mañana están aquí.
Mis ideas, mis percepciones, mis conceptos.
La idea del tú, la idea del yo.
Mis sapiencias, mi desarrollo, comienza en esta máquina generadora e indetenible.
Mi fábrica incansable e insaturable.
Este es nuestro salvavidas de la realidad.
Este en realidad es nuestro salvavidas.
En el tetra elemental es el aire.
En nuestras personas es la mente.
Esto es realidad y mentira.
Esto es estar cuerdo y correr desnudo por la calle acompañado de colores comprensivos.
Vuelo sin inhibiciones a remotos lugares.
Me desplazo a la velocidad de la luz a lugares que nunca llegarás.
Llegaré a lugares de ti en los que tu no estarás, pero sí, tu siempre estarás allí.
La mente es esclavista.
la mente es libertad.
La mente me forja y yo la forjo a ella.
Realidad y fantasía bailan un waltz que cesará con la pérdida de mi envase.
¿A dónde van mis recuerdos cuando muera?
¿Qué pasará con lo que aprenda?
¿De dónde sale eso que cree?
¿Qué harás tu con lo que “sabes” de mi?
¿Qué hace el universo con todo esto?
Un libro es la metáfora tangible de la memoria.
Una pintura es la metonimia de la imaginación.
Esto que escribo es mi ego plasmado en letras.
Una forma incompleta de mi realidad.
Mi incapacidad de aflorar esta energía para que como yo la ames.
Esta es la forma más cercana a ser una deidad.
Mi fantasma, mi incorporeidad.
Soy un gas que se traslada a todos los espacios.
Tratas de entenderme, trato de entenderte.
Entrar en otro ser es utópico.
Mas sería divino.
Un orgasmo caótico e intoxicante.
La posesión de una vida nueva dentro de la existencia propia.
Un tu y yo muy cercano y aun así escaso.
La mente se encuentra en el cerebro.
Mi cerebro es la ubicación geográfica de mis ideas.
La mente me mantiene con vida.
Desde mi mente me encadenan y me dejo encadenar.
Mi mente es mi espacio personal.
La mente es soledad.
Drogas y mentiras alteran la llegada de información, pero la mente nunca deja de percibir.
Voraz apetito de saber.
Le tememos a la mente.
Nos tememos a nosotros mismos.
Atentamos conocer a otros.
¿Cuándo te vas a conocer a ti?
¿En qué momento apretarás esos miedos con tanta fuerza que te permita reventarlos como ampollas?
Abraza a tus miedos, abrázate a ti.
Revuélcate en tu propia inmundicia y hazlo con orgullo por ser tuya.
Sueños, pesadillas, esperanzas, desconfianza.
Todo se engendra en esta intangibilidad delicada.
¿Qué tanto te afecta?
¿Hasta dónde lo dejarás llegar?
Es tu decisión.
Es la mía.
La mente lo puede todo.
La mente puede nada.
La mente puede.
¿Por qué escapamos a un enemigo que llevamos sobre los hombros?
¿Qué me hace tan insoportable para mí mismo que intento evitarme?
¿Qué me produce tanto temor que pienso en la autodestrucción?
Tenemos tanto miedo de nuestras capacidades, que no las exploramos.
Estamos tan seguros de nuestra inseguridad, que ni sabemos si existe.
De mentes salieron grilletes y cadenas.
De mentes nació el tiempo.
De mentes las medidas.
De mentes los nombres.
De mentes las ideas.
De mentes las necesidades que exceden lo necesario.
De mentes las frustraciones.
De mentes el dinero.
De mentes religiones.
De mentes el encasillamiento de Dios.
De mentes los límites.
De mentes el control.
Dementes, todos dementes.
Todos vivimos una realidad esculpida.
Somos escultores de la neblina.
Esperanza.
¿Hay esperanza?
Tanta como le permitamos a la mente a través del corazón albergar.
Nuestra esperanza exige consciencia, pero es la consciencia a lo que le tememos.
Todos tenemos en las manos la verdad.
Todos tenemos conocimiento pleno de la realidad.
Todos corremos en círculos persiguiéndonos las colas como perros, para no dar el paso final.
El paso que trasciende a la mente.
El paso que nos lleva a la realidad absoluta.
La aprensión del todo.
El ser.
Mientras me amarre a toda esta percepción esculpida de niebla.
Mientras no tenga fe en que morder estas cadenas me liberará.
Mientras me amarre a las ideas de otros.
Mientras sea un demente mas.
Solo me queda una vana idea de ser, estar y parecer.
Estar.
Parecer.
Una amalgama de realidades se conjugan en este espacio.
Acá soy yo en una de mis más puras expresiones.
En esta dimensión intangible siempre estás para mi.
En forma de recuerdos, de ideas, de fantasías.
Una purga de impresiones se amasa y se mantiene.
En mi hago historia.
Soy un escultor de la neblina.
En sueños y despierto, siempre soy.
Desde el blanco hasta el negro y pasando por todos los tonos del gris.
Formas, colores, memorias y aprendizajes.
El ayer, el hoy y una idea del mañana están aquí.
Mis ideas, mis percepciones, mis conceptos.
La idea del tú, la idea del yo.
Mis sapiencias, mi desarrollo, comienza en esta máquina generadora e indetenible.
Mi fábrica incansable e insaturable.
Este es nuestro salvavidas de la realidad.
Este en realidad es nuestro salvavidas.
En el tetra elemental es el aire.
En nuestras personas es la mente.
Esto es realidad y mentira.
Esto es estar cuerdo y correr desnudo por la calle acompañado de colores comprensivos.
Vuelo sin inhibiciones a remotos lugares.
Me desplazo a la velocidad de la luz a lugares que nunca llegarás.
Llegaré a lugares de ti en los que tu no estarás, pero sí, tu siempre estarás allí.
La mente es esclavista.
la mente es libertad.
La mente me forja y yo la forjo a ella.
Realidad y fantasía bailan un waltz que cesará con la pérdida de mi envase.
¿A dónde van mis recuerdos cuando muera?
¿Qué pasará con lo que aprenda?
¿De dónde sale eso que cree?
¿Qué harás tu con lo que “sabes” de mi?
¿Qué hace el universo con todo esto?
Un libro es la metáfora tangible de la memoria.
Una pintura es la metonimia de la imaginación.
Esto que escribo es mi ego plasmado en letras.
Una forma incompleta de mi realidad.
Mi incapacidad de aflorar esta energía para que como yo la ames.
Esta es la forma más cercana a ser una deidad.
Mi fantasma, mi incorporeidad.
Soy un gas que se traslada a todos los espacios.
Tratas de entenderme, trato de entenderte.
Entrar en otro ser es utópico.
Mas sería divino.
Un orgasmo caótico e intoxicante.
La posesión de una vida nueva dentro de la existencia propia.
Un tu y yo muy cercano y aun así escaso.
La mente se encuentra en el cerebro.
Mi cerebro es la ubicación geográfica de mis ideas.
La mente me mantiene con vida.
Desde mi mente me encadenan y me dejo encadenar.
Mi mente es mi espacio personal.
La mente es soledad.
Drogas y mentiras alteran la llegada de información, pero la mente nunca deja de percibir.
Voraz apetito de saber.
Le tememos a la mente.
Nos tememos a nosotros mismos.
Atentamos conocer a otros.
¿Cuándo te vas a conocer a ti?
¿En qué momento apretarás esos miedos con tanta fuerza que te permita reventarlos como ampollas?
Abraza a tus miedos, abrázate a ti.
Revuélcate en tu propia inmundicia y hazlo con orgullo por ser tuya.
Sueños, pesadillas, esperanzas, desconfianza.
Todo se engendra en esta intangibilidad delicada.
¿Qué tanto te afecta?
¿Hasta dónde lo dejarás llegar?
Es tu decisión.
Es la mía.
La mente lo puede todo.
La mente puede nada.
La mente puede.
¿Por qué escapamos a un enemigo que llevamos sobre los hombros?
¿Qué me hace tan insoportable para mí mismo que intento evitarme?
¿Qué me produce tanto temor que pienso en la autodestrucción?
Tenemos tanto miedo de nuestras capacidades, que no las exploramos.
Estamos tan seguros de nuestra inseguridad, que ni sabemos si existe.
De mentes salieron grilletes y cadenas.
De mentes nació el tiempo.
De mentes las medidas.
De mentes los nombres.
De mentes las ideas.
De mentes las necesidades que exceden lo necesario.
De mentes las frustraciones.
De mentes el dinero.
De mentes religiones.
De mentes el encasillamiento de Dios.
De mentes los límites.
De mentes el control.
Dementes, todos dementes.
Todos vivimos una realidad esculpida.
Somos escultores de la neblina.
Esperanza.
¿Hay esperanza?
Tanta como le permitamos a la mente a través del corazón albergar.
Nuestra esperanza exige consciencia, pero es la consciencia a lo que le tememos.
Todos tenemos en las manos la verdad.
Todos tenemos conocimiento pleno de la realidad.
Todos corremos en círculos persiguiéndonos las colas como perros, para no dar el paso final.
El paso que trasciende a la mente.
El paso que nos lleva a la realidad absoluta.
La aprensión del todo.
El ser.
Mientras me amarre a toda esta percepción esculpida de niebla.
Mientras no tenga fe en que morder estas cadenas me liberará.
Mientras me amarre a las ideas de otros.
Mientras sea un demente mas.
Solo me queda una vana idea de ser, estar y parecer.
miércoles, 18 de enero de 2012
Ojo 02: Piel
Yo soy.
Tu eres.
Yo estoy.
Tu estas.
Yo parezco.
Tu pareces.
Capas y capas una tras otra me cubren sobre el ser.
¿Soy este yo? ¿o es solo parte de mi?
Esto es sentir, ¿a esto me dedico?
Calor, frío, dolor, placer.
Pica, arde, duele y quema.
Eriza, agrada y hace cosquillas.
Esto es sentir ¿acaso es vivir?
¿Y tu? ¿qué sientes?
Esta es la parte tangible de mi.
En el tetra elemental es la tierra.
Es lo que se palpa, es lo que me deja palpar.
Es la piel.
Pero este no soy yo, solo un parcial.
El cuerpo no es ser, solo es estar.
Gracias a mi cuerpo disfruto de las cosas básicas de la vida.
Gracias a mi cuerpo sufro de las necesidades básica de la existencia.
Tengo hambre.
Tengo sueño.
Necesito el baño.
Tengo sed.
Quiero sexo.
Necesito respirar.
Son cinco sentidos que me encadenan a la vida.
Ver, tocar, oler, probar y escuchar.
Sin todo esto, solo soy un fantasma.
Quiero escuchar música, degustar cada platillo que se pueda preparar.
Me entrego a los colores cada día, Deleitarme del aroma de todas las flores.
Muero por sentirte de todas las formas posibles, en cada célula de mi cuerpo.
Quiero sentirte.
No estaría vivo sin cuerpo.
Sin cuerpo no moriría.
El cuerpo caduca, poco a poco se esfuma como un sueño y al despertar, no estaré, pero seguiré siendo.
El cuerpo es una parte elemental que me permite diferenciarme de otros.
Esto es estar, pero es parte de mi ser.
¿Qué clase de existencia es el cuerpo?
¿Cuantos complejos me puede dar?
La perfección habita en el ser dado por ideales imperfectos que decidimos dar por ciertos aun siendo improbables.
Cada cosa en su propio envase es la maravilla del aliento universal.
Te gusta el envase, te disgusta el envase.
En realidad ni lo sabes.
Una mas de las maravillas sociales: la percepción de la belleza.
¿Cuando podré liberarme de esta esclavitud?
¿Por qué temes a la diferencia?
¿Qué sentido tendrá todo esto al final?
¿Cuanto de esta belleza podremos conservar?
Y cuando simplemente se esfume, como cada cosa que el universo crea.
Cuando simplemente se transforme como toda forma de energía y materia.
¿Aun seremos quienes somos?
¿te sumirás en la miseria ante la imposibilidad de llenar los conceptos de belleza de otros?
Yo he comprendido que la belleza existe en los ojos de quién la percibe.
La belleza es en realidad amor.
El cuerpo me envasa y me aleja de ti.
Nunca podré unirme a ti encerrado en este cuerpo.
Nunca te acercarás a mi lo suficiente.
Abrázame y emula en esa unión corpórea la unión de nuestras almas.
Disfruta mi estadía, sufre mi despedida.
El cuerpo nos hace pagar una deuda: la vida.
¿y cómo amarnos sin cuerpo?
Si alguna vez logro atravesar estas paredes cutáneas que me encierran.
Si en algún momento llego a sentirte sin mi piel.
Si algún día me puedo unir a ti sin dejar de ser yo.
Ese espacio de tiempo será perfecto.
Mientras tanto.
Yo soy.
Tu eres.
Yo estoy.
Tu estas.
Yo parezco.
Tu pareces.
Tu eres.
Yo estoy.
Tu estas.
Yo parezco.
Tu pareces.
Capas y capas una tras otra me cubren sobre el ser.
¿Soy este yo? ¿o es solo parte de mi?
Esto es sentir, ¿a esto me dedico?
Calor, frío, dolor, placer.
Pica, arde, duele y quema.
Eriza, agrada y hace cosquillas.
Esto es sentir ¿acaso es vivir?
¿Y tu? ¿qué sientes?
Esta es la parte tangible de mi.
En el tetra elemental es la tierra.
Es lo que se palpa, es lo que me deja palpar.
Es la piel.
Pero este no soy yo, solo un parcial.
El cuerpo no es ser, solo es estar.
Gracias a mi cuerpo disfruto de las cosas básicas de la vida.
Gracias a mi cuerpo sufro de las necesidades básica de la existencia.
Tengo hambre.
Tengo sueño.
Necesito el baño.
Tengo sed.
Quiero sexo.
Necesito respirar.
Son cinco sentidos que me encadenan a la vida.
Ver, tocar, oler, probar y escuchar.
Sin todo esto, solo soy un fantasma.
Quiero escuchar música, degustar cada platillo que se pueda preparar.
Me entrego a los colores cada día, Deleitarme del aroma de todas las flores.
Muero por sentirte de todas las formas posibles, en cada célula de mi cuerpo.
Quiero sentirte.
No estaría vivo sin cuerpo.
Sin cuerpo no moriría.
El cuerpo caduca, poco a poco se esfuma como un sueño y al despertar, no estaré, pero seguiré siendo.
El cuerpo es una parte elemental que me permite diferenciarme de otros.
Esto es estar, pero es parte de mi ser.
¿Qué clase de existencia es el cuerpo?
¿Cuantos complejos me puede dar?
La perfección habita en el ser dado por ideales imperfectos que decidimos dar por ciertos aun siendo improbables.
Cada cosa en su propio envase es la maravilla del aliento universal.
Te gusta el envase, te disgusta el envase.
En realidad ni lo sabes.
Una mas de las maravillas sociales: la percepción de la belleza.
¿Cuando podré liberarme de esta esclavitud?
¿Por qué temes a la diferencia?
¿Qué sentido tendrá todo esto al final?
¿Cuanto de esta belleza podremos conservar?
Y cuando simplemente se esfume, como cada cosa que el universo crea.
Cuando simplemente se transforme como toda forma de energía y materia.
¿Aun seremos quienes somos?
¿te sumirás en la miseria ante la imposibilidad de llenar los conceptos de belleza de otros?
Yo he comprendido que la belleza existe en los ojos de quién la percibe.
La belleza es en realidad amor.
El cuerpo me envasa y me aleja de ti.
Nunca podré unirme a ti encerrado en este cuerpo.
Nunca te acercarás a mi lo suficiente.
Abrázame y emula en esa unión corpórea la unión de nuestras almas.
Disfruta mi estadía, sufre mi despedida.
El cuerpo nos hace pagar una deuda: la vida.
¿y cómo amarnos sin cuerpo?
Si alguna vez logro atravesar estas paredes cutáneas que me encierran.
Si en algún momento llego a sentirte sin mi piel.
Si algún día me puedo unir a ti sin dejar de ser yo.
Ese espacio de tiempo será perfecto.
Mientras tanto.
Yo soy.
Tu eres.
Yo estoy.
Tu estas.
Yo parezco.
Tu pareces.
domingo, 15 de enero de 2012
Ojo 01: Reloj
Ayer.
Ayer fue ayer.
Hoy.
Hoy es hoy.
Mañana.
Mañana será mañana.
Fue, es, será; las palabras que marcan nuestra existencia.
Hay un desplazamiento de un inmortal pero decadente cuadro al que llamamos tiempo.
Desde hoy a un mes se hará ya un año desde que ese ayer fue mañana.
Y es que aunque siempre es hoy, hoy fue ayer y mañana.
El hoy nunca acaba.
El hoy no perece.
El hoy no fracasa.
Mas sin embargo siempre recordaré el ayer y tendré el mañana.
Pero ¿y cuando los tendré?
Siempre los tendré hoy.
Porque aunque tuve un ayer, ayer fue hoy y mañana.
Los recuerdos vienen del ayer.
Pero siempre llegan hoy.
Mis esperanzas viajan al futuro.
Pero siempre las tengo hoy.
Todo lo que pensé, todo lo que hice, todos esos sueños, se han mantenido en línea continua hasta hoy.
Mañana será hoy y será ayer.
Que empeño el de control, el de querer tener todo en las manos.
Medir el tiempo, enredarse en empresas sin destino cierto.
Porque si bien vivimos el día de ayer, lo vivimos hoy.
El ayer solo queda almacenado, como datos distorsionados de una realidad unilateral que tomamos por vida.
El ayer nos llena de experiencias, razones y de predisposición.
El ayer castiga al perdón.
El ayer es un fantasma.
El ayer ya no existe.
Hoy no soy quien fui ayer, siempre he sido hoy.
Inventamos el nano, la millonésima, la milésima, centésima, décimas, segundos, minutos, horas, cuartos, medios, días, semanas, quincenas, meses, trimestres, estaciones, semestres, años, década, siglos, milénios, eones.
¿Para qué?
Para procurarnos mas preocupaciones. para procurarnos interacción controlada.
Para encadenarnos a un reloj.
Para limitarnos.
Para una vez mas no ser.
Es impresionante la sensación de seguridad que produce la idea del manejo de nuestras vidas.
Hoy se que haré mañana, a pesar de que el mañana no ha comenzado.
El mañana es una promesa descarada, porque mañana siempre será hoy y en cuestión de tiempo un espasmódico ayer.
El tiempo es el tirano de la libertad.
Agendas, calendarios, relojes, cronómetros, computadores, almanaques.
Todas invenciones, dominatrices de el mundo que nos hemos planteado por ideal, en el cual todos somos lo que no somos.
Mañana seré condenado por mis acciones de ayer.
Muchos nos hemos amarrado al pasado o hemos sido retenidos por la trampa del futuro.
Pero somos pocos los que sabemos lo que es vivir hoy y mas aun, ahora.
La vida se compara a un cigarrillo suavemente fumado a través de una boquilla de marfil tallada a mano, sostenida por un dictador auto impuesto.
Siempre queremos controlar y ser controlados.
Vivimos atrapado en fantasias tan fuertes que las hacemos ciertas.
Ayer, mañana y siempre, será hoy.
Siempre será, ha sido sido y es ahora.
Nacemos con una fortaleza invaluable.
La capacidad de ser sin temores.
Pero le llamo ser fuerte a tener miedo.
A cubrirme de ser herido.
Le llamo ser fuerte a privarme de la plenitud.
Le llamo ser grande a no correr riesgos.
La madurez es un retroceso.
Ese proceso en el cual la vida nos talla para formarnos, nos desgasta.
Nos llena de experiencias, pero nos resta confianza.
Ese proceso al que nos soldamos.
Esa misera existencial se llama tiempo.
Recordamos mucho del pasado.
Planificamos mucho para el futuro.
Pero no aprendemos del hoy.
Siempre es hoy.
Ayer ya no es.
Nunca será mañana.
Dejamos de vivir el ahora por culpa del pasado y dejamos todo para el futuro sin saber si lo tenemos.
Yo nací un día de hoy y casualmente un día de hoy moriré.
Ya no tendré que buscar mas la libertad para amarte, porque la libertad me va a encontrar a mi, el día que deseche mis artilugios de auto-control.
Mientras tanto, seguiré sumido en el terror de vivir a al deriva, sin mediciones de mi ahora.
Te amaré libremente, en un espacio y un tiempo sin relojes.
Por lo pronto, intento convencerme de que sea hoy y no un amor de ayer o mañana.
Dado que no logro desligarme totalmente de las ideas temporales, aun idealizo el almanaque.
Ayer.
Ayer fue ayer.
Hoy.
Hoy es hoy.
Mañana.
Mañana será mañana.
Ayer fue ayer.
Hoy.
Hoy es hoy.
Mañana.
Mañana será mañana.
Fue, es, será; las palabras que marcan nuestra existencia.
Hay un desplazamiento de un inmortal pero decadente cuadro al que llamamos tiempo.
Desde hoy a un mes se hará ya un año desde que ese ayer fue mañana.
Y es que aunque siempre es hoy, hoy fue ayer y mañana.
El hoy nunca acaba.
El hoy no perece.
El hoy no fracasa.
Mas sin embargo siempre recordaré el ayer y tendré el mañana.
Pero ¿y cuando los tendré?
Siempre los tendré hoy.
Porque aunque tuve un ayer, ayer fue hoy y mañana.
Los recuerdos vienen del ayer.
Pero siempre llegan hoy.
Mis esperanzas viajan al futuro.
Pero siempre las tengo hoy.
Todo lo que pensé, todo lo que hice, todos esos sueños, se han mantenido en línea continua hasta hoy.
Mañana será hoy y será ayer.
Que empeño el de control, el de querer tener todo en las manos.
Medir el tiempo, enredarse en empresas sin destino cierto.
Porque si bien vivimos el día de ayer, lo vivimos hoy.
El ayer solo queda almacenado, como datos distorsionados de una realidad unilateral que tomamos por vida.
El ayer nos llena de experiencias, razones y de predisposición.
El ayer castiga al perdón.
El ayer es un fantasma.
El ayer ya no existe.
Hoy no soy quien fui ayer, siempre he sido hoy.
Inventamos el nano, la millonésima, la milésima, centésima, décimas, segundos, minutos, horas, cuartos, medios, días, semanas, quincenas, meses, trimestres, estaciones, semestres, años, década, siglos, milénios, eones.
¿Para qué?
Para procurarnos mas preocupaciones. para procurarnos interacción controlada.
Para encadenarnos a un reloj.
Para limitarnos.
Para una vez mas no ser.
Es impresionante la sensación de seguridad que produce la idea del manejo de nuestras vidas.
Hoy se que haré mañana, a pesar de que el mañana no ha comenzado.
El mañana es una promesa descarada, porque mañana siempre será hoy y en cuestión de tiempo un espasmódico ayer.
El tiempo es el tirano de la libertad.
Agendas, calendarios, relojes, cronómetros, computadores, almanaques.
Todas invenciones, dominatrices de el mundo que nos hemos planteado por ideal, en el cual todos somos lo que no somos.
Mañana seré condenado por mis acciones de ayer.
Muchos nos hemos amarrado al pasado o hemos sido retenidos por la trampa del futuro.
Pero somos pocos los que sabemos lo que es vivir hoy y mas aun, ahora.
La vida se compara a un cigarrillo suavemente fumado a través de una boquilla de marfil tallada a mano, sostenida por un dictador auto impuesto.
Siempre queremos controlar y ser controlados.
Vivimos atrapado en fantasias tan fuertes que las hacemos ciertas.
Ayer, mañana y siempre, será hoy.
Siempre será, ha sido sido y es ahora.
Nacemos con una fortaleza invaluable.
La capacidad de ser sin temores.
Pero le llamo ser fuerte a tener miedo.
A cubrirme de ser herido.
Le llamo ser fuerte a privarme de la plenitud.
Le llamo ser grande a no correr riesgos.
La madurez es un retroceso.
Ese proceso en el cual la vida nos talla para formarnos, nos desgasta.
Nos llena de experiencias, pero nos resta confianza.
Ese proceso al que nos soldamos.
Esa misera existencial se llama tiempo.
Recordamos mucho del pasado.
Planificamos mucho para el futuro.
Pero no aprendemos del hoy.
Siempre es hoy.
Ayer ya no es.
Nunca será mañana.
Dejamos de vivir el ahora por culpa del pasado y dejamos todo para el futuro sin saber si lo tenemos.
Yo nací un día de hoy y casualmente un día de hoy moriré.
Ya no tendré que buscar mas la libertad para amarte, porque la libertad me va a encontrar a mi, el día que deseche mis artilugios de auto-control.
Mientras tanto, seguiré sumido en el terror de vivir a al deriva, sin mediciones de mi ahora.
Te amaré libremente, en un espacio y un tiempo sin relojes.
Por lo pronto, intento convencerme de que sea hoy y no un amor de ayer o mañana.
Dado que no logro desligarme totalmente de las ideas temporales, aun idealizo el almanaque.
Ayer.
Ayer fue ayer.
Hoy.
Hoy es hoy.
Mañana.
Mañana será mañana.
Ojo 00: Conjugación.
Yo.
Yo soy yo.
Tú.
Tu eres tu.
Yo quiero encontrarte
Y te preguntarás: "¿y quién soy yo?"
Tú eres tu.
Entonces, ¿quién soy yo?
Yo soy yo.
¿Y a quién busco entonces?
Te busco a ti.
¿Por qué te busco?
Porque te quiero.
En tu concepción, siempre serás un yo y yo seré un tu.
¿Entonces a quién quiero? ¿A ti o a mi?
Te quiero a ti.
¿Y no me quiero a mi?
También me quiero a mi.
Si yo soy yo y tu eres tu, ¿por qué te quiero a ti? Si ya me quiero a mi.
¿En qué momento seré yo para ti? si para ti siempre soy tu. ¿No te das cuenta? Yo soy yo y Tu eres yo.
Yo siempre seré tu en tu percepción y en la mía, yo seré yo.
¿Por qué me importas?
Tu no eres yo.
Me importo yo.
Formas parte de mis intereses, así que me importas tu como parte de un yo, por ende, te quiero, tal vez no como un sentimiento, pero si como a una idea.
Entonces sí, yo soy yo y tu eres tu, pero para ti tu eres yo y yo soy tu, no me buscas a mi, te buscas a ti.
Pero es que te busco a ti.
Eso se traduce en una búsqueda de mi, entonces...
¿Qué quiero?
Quiero control, quiero tomar mis propias decisiones y sentir estabilidad en la seguridad que procura el saber del futuro y que este se vió afectado por mi.
Quiero sentir que me perteneces y que en ti estaré completo.
Ya se, yo no te quiero, me quiero a mi y tu no eres para mi mas que una consecuencia de mi amor propio.
Pero siendo que yo soy tu, se que quieres control.
¿Quieres controlarme?
Por eso dices que me quieres a mi, al tenerme a mi, sentiras el placer de tenerte a ti, que para ti, eres yo.
Pero aun así, yo seré yo y tu serás tu.
Cada uno de nosotros es un yo, pero solo quiero controlar a mi yo, no al tuyo.
Indeflectiblemente, al controlar mi yo junto al tuyo, este a su vez quedará controlado.
Quiero controlarlo todo.
Quiero saberme vivo, saber que estoy, abrazar a mi nombre y pertenecer a mi, contigo a mi lado.
Mas eso ya sería un nosotros, un escenario perfecto, en el que tu y yo estaríamos juntos.
Pero aun así, tu serías tu y yo sería yo.
¿En donde quedaría yo contigo en mi?
¿Seguiría siendo yo?
¿Qué sería de ti?
¿Y es que acaso el yo se resume a mi cuerpo?
¿Cómo me uno a ti sin dejar de ser yo? Y tu en tus haberes, siempre serás un yo, pero yo seré yo y tú serás tu.
La necesidad de diferenciarnos, evita que estemos unidos, sin embargo, en medio del egoismo, mantenemos a raya todo aquello que nos hace uno.
No uno en uno, sino un todo en uno.
¿Todo?
Todo somos nosotros, pero también ellos.
Pero ¿quiénes son ellos?
¿Qué les importa a ellos?
¿Qué te importa a ti?
En realidad, ¿qué me importa a mi?
Solo te quiero a ti y a mi en uno y no puedo, porque tu insistes en ser tu y yo no he podido dejar de ser yo.
La necesidad de tener en nuestras manos la información de todo, nos hace celosos con ella y alejamos a los demás, dejando gotear solamente aquello que es menos relevante.
De ese modo conservamos la individualidad, asegurándonos de que tú seas tu y yo sea yo.
Controlo mi consciencia, para sentirme bien y ese bienestar la hace a si misma, entonces es un ciclo de retroalimentación de un perenne agónico, que me aleja de ti.
Es tan desesperado, que me he amañado y controlo horarios, lugares y hasta me aferré al sentido de posesión y me creí lo de las divisiones territoriales.
Quiero poseer tanto la capacidad de manipulación general, que acudo al psicólogo y allí descubro que yo no soy yo, sino una serie de síntomas.
Pero la verdad es que poco me importa, porque me importas tu y al final, yo, sigo siendo yo.
Así, nos mordisqueamos el yo unos a los otros y hasta se acaban los espacios para el tu.
¿Y si me descubro haciendo algo que no esperaba?
¿Y si trasciendo la fuerza de una voluntad autoimpuesta?
¿Ese soy yo?
¿Cómo me reconozco en un espacio desconocido?
¿Quién soy si nadie me recuerda?
En ese caso ¿soy? Y mas aun ¿soy yo?
Ese también eres tu, pues en tu propia concepción, serás yo.
Y así, somos como del mismo líquido, en distintos recipientes iguales, con diferentes estiquetas.
Necesito salir del envase, para poder estar junto a ti.
Lo ideal no es un tu o un yo, tampoco un pobre nosotros.
Lo ideal es ser.
Entonces solo cuando tu no seas tu y yo no sea yo, sino solo seamos, podremos experimentar el amor, en un espacio y un tiempo en el que no haya conjugaciones.
Pero por lo pronto, yo.
Yo soy yo.
Tú.
Tu eres tu.
Yo soy yo.
Tú.
Tu eres tu.
Yo quiero encontrarte
Y te preguntarás: "¿y quién soy yo?"
Tú eres tu.
Entonces, ¿quién soy yo?
Yo soy yo.
¿Y a quién busco entonces?
Te busco a ti.
¿Por qué te busco?
Porque te quiero.
En tu concepción, siempre serás un yo y yo seré un tu.
¿Entonces a quién quiero? ¿A ti o a mi?
Te quiero a ti.
¿Y no me quiero a mi?
También me quiero a mi.
Si yo soy yo y tu eres tu, ¿por qué te quiero a ti? Si ya me quiero a mi.
¿En qué momento seré yo para ti? si para ti siempre soy tu. ¿No te das cuenta? Yo soy yo y Tu eres yo.
Yo siempre seré tu en tu percepción y en la mía, yo seré yo.
¿Por qué me importas?
Tu no eres yo.
Me importo yo.
Formas parte de mis intereses, así que me importas tu como parte de un yo, por ende, te quiero, tal vez no como un sentimiento, pero si como a una idea.
Entonces sí, yo soy yo y tu eres tu, pero para ti tu eres yo y yo soy tu, no me buscas a mi, te buscas a ti.
Pero es que te busco a ti.
Eso se traduce en una búsqueda de mi, entonces...
¿Qué quiero?
Quiero control, quiero tomar mis propias decisiones y sentir estabilidad en la seguridad que procura el saber del futuro y que este se vió afectado por mi.
Quiero sentir que me perteneces y que en ti estaré completo.
Ya se, yo no te quiero, me quiero a mi y tu no eres para mi mas que una consecuencia de mi amor propio.
Pero siendo que yo soy tu, se que quieres control.
¿Quieres controlarme?
Por eso dices que me quieres a mi, al tenerme a mi, sentiras el placer de tenerte a ti, que para ti, eres yo.
Pero aun así, yo seré yo y tu serás tu.
Cada uno de nosotros es un yo, pero solo quiero controlar a mi yo, no al tuyo.
Indeflectiblemente, al controlar mi yo junto al tuyo, este a su vez quedará controlado.
Quiero controlarlo todo.
Quiero saberme vivo, saber que estoy, abrazar a mi nombre y pertenecer a mi, contigo a mi lado.
Mas eso ya sería un nosotros, un escenario perfecto, en el que tu y yo estaríamos juntos.
Pero aun así, tu serías tu y yo sería yo.
¿En donde quedaría yo contigo en mi?
¿Seguiría siendo yo?
¿Qué sería de ti?
¿Y es que acaso el yo se resume a mi cuerpo?
¿Cómo me uno a ti sin dejar de ser yo? Y tu en tus haberes, siempre serás un yo, pero yo seré yo y tú serás tu.
La necesidad de diferenciarnos, evita que estemos unidos, sin embargo, en medio del egoismo, mantenemos a raya todo aquello que nos hace uno.
No uno en uno, sino un todo en uno.
¿Todo?
Todo somos nosotros, pero también ellos.
Pero ¿quiénes son ellos?
¿Qué les importa a ellos?
¿Qué te importa a ti?
En realidad, ¿qué me importa a mi?
Solo te quiero a ti y a mi en uno y no puedo, porque tu insistes en ser tu y yo no he podido dejar de ser yo.
La necesidad de tener en nuestras manos la información de todo, nos hace celosos con ella y alejamos a los demás, dejando gotear solamente aquello que es menos relevante.
De ese modo conservamos la individualidad, asegurándonos de que tú seas tu y yo sea yo.
Controlo mi consciencia, para sentirme bien y ese bienestar la hace a si misma, entonces es un ciclo de retroalimentación de un perenne agónico, que me aleja de ti.
Es tan desesperado, que me he amañado y controlo horarios, lugares y hasta me aferré al sentido de posesión y me creí lo de las divisiones territoriales.
Quiero poseer tanto la capacidad de manipulación general, que acudo al psicólogo y allí descubro que yo no soy yo, sino una serie de síntomas.
Pero la verdad es que poco me importa, porque me importas tu y al final, yo, sigo siendo yo.
Así, nos mordisqueamos el yo unos a los otros y hasta se acaban los espacios para el tu.
¿Y si me descubro haciendo algo que no esperaba?
¿Y si trasciendo la fuerza de una voluntad autoimpuesta?
¿Ese soy yo?
¿Cómo me reconozco en un espacio desconocido?
¿Quién soy si nadie me recuerda?
En ese caso ¿soy? Y mas aun ¿soy yo?
Ese también eres tu, pues en tu propia concepción, serás yo.
Y así, somos como del mismo líquido, en distintos recipientes iguales, con diferentes estiquetas.
Necesito salir del envase, para poder estar junto a ti.
Lo ideal no es un tu o un yo, tampoco un pobre nosotros.
Lo ideal es ser.
Entonces solo cuando tu no seas tu y yo no sea yo, sino solo seamos, podremos experimentar el amor, en un espacio y un tiempo en el que no haya conjugaciones.
Pero por lo pronto, yo.
Yo soy yo.
Tú.
Tu eres tu.
martes, 10 de enero de 2012
10000 días de invierno
Todas las palabras han sido dichas
No hay algo nuevo que yo pueda aportar
Ya se sabe todo y tan poco se hace
Con mas de diezmil días vividos ya he visto el final
¿Viviré para ver el final de este invierno?
Con este cuerpo inyectado de años
La sangre se ha comenzado a granizar
Y un corazón congelado en dolor y decepciones
Se ve imposibilitado para bombear.
Mis pulsaciones han sesado en sus intentos
Y la idea de amor que tenía se hundió
Pues el amor entre humanos no existe
La luz que puso Dios en mi se extinguió.
En esta nave de nuevos ideales desesperanzados
Todo color se ha vuelto de un tono gris cadaver
Toda concepción de pertenencia se ha apartado
Y el ímpetu de seguir mariposas, paró en desaires.
¿Viviré para ver el final de este invierno?
Con esta carga helada a la cuesta de una mentira
Arrastrando gente en el camino a la cima de mi
Viviendo placebos en la piel de besos y caricias
Y abrazos de fansatsía que prefiero no sentir.
Cada apego que tuve bajo la nieve quedó sepultado
Como ahogadas en la ventisca quedaron mis emociones
Allí van cuesta abajo mis amores crsitalizados
pues este frío invierno lleva en mi cuatro estaciones.
No hay sol que pase estas grises nubes
Ni falso amor que penetre esta fría coraza
Pues la cálida piel que alguna vez tuve
Ahora esta envuelta en blanca escarcha.
¿Viviré para ver el final de este invierno?
Todas las palabras han sido dichas
No hay algo nuevo que yo pueda aportar
Ya se sabe todo y tan poco se hace
Con mas de diezmil días vividos ya he visto el final.
Y si soy capaz de sobrevir este invierno
Le juro al amor que no lo vuelvo a buscar
Porque congelado y muerto en mi frío infierno
Primavera, otoño y verano no me vuelven a engañar.
No hay algo nuevo que yo pueda aportar
Ya se sabe todo y tan poco se hace
Con mas de diezmil días vividos ya he visto el final
¿Viviré para ver el final de este invierno?
Con este cuerpo inyectado de años
La sangre se ha comenzado a granizar
Y un corazón congelado en dolor y decepciones
Se ve imposibilitado para bombear.
Mis pulsaciones han sesado en sus intentos
Y la idea de amor que tenía se hundió
Pues el amor entre humanos no existe
La luz que puso Dios en mi se extinguió.
En esta nave de nuevos ideales desesperanzados
Todo color se ha vuelto de un tono gris cadaver
Toda concepción de pertenencia se ha apartado
Y el ímpetu de seguir mariposas, paró en desaires.
¿Viviré para ver el final de este invierno?
Con esta carga helada a la cuesta de una mentira
Arrastrando gente en el camino a la cima de mi
Viviendo placebos en la piel de besos y caricias
Y abrazos de fansatsía que prefiero no sentir.
Cada apego que tuve bajo la nieve quedó sepultado
Como ahogadas en la ventisca quedaron mis emociones
Allí van cuesta abajo mis amores crsitalizados
pues este frío invierno lleva en mi cuatro estaciones.
No hay sol que pase estas grises nubes
Ni falso amor que penetre esta fría coraza
Pues la cálida piel que alguna vez tuve
Ahora esta envuelta en blanca escarcha.
¿Viviré para ver el final de este invierno?
Todas las palabras han sido dichas
No hay algo nuevo que yo pueda aportar
Ya se sabe todo y tan poco se hace
Con mas de diezmil días vividos ya he visto el final.
Y si soy capaz de sobrevir este invierno
Le juro al amor que no lo vuelvo a buscar
Porque congelado y muerto en mi frío infierno
Primavera, otoño y verano no me vuelven a engañar.
sábado, 7 de enero de 2012
life tax/ El impuesto de la vida
One did not ask to be procreated
One did not ask to born
One just ask to live
Then one never spect to die...
We hold life as if it belongs to us
When in fact, We are just carrying lended energy
When in fact, that is what We are
Just lended energy...
One and each of us
We are an oportunity in a million
We are millions of oportunities...
So, don't waste yourself.
Everything in life is a deluxe article
From a painful crying to an explosive laughing
One never knows when is going to be the last time
So, gotta enjoy every single micro section of it...
suffer Your pain as the last one
And enjoy the laughing as the first
Because in the end...
Everything You are, is just everything You've done.
Uno no pidió ser procreado
Uno no pidió nacer
Uno solo pide vivir
Entonces uno nunca espera morir...
Nos aferramos a la vida como si nos perteneciera
Cuando en realidad, solo llevamos energía prestada
Cuando en realidad, es eso lo que somos
Energía prestada...
Todos y cada uno de nosotros
Somos una oportunidad en un millón
Somos millones de oportunidades...
Así que, no te desperdicies.
Todo en la vida es un artículo de lujo
Desde un doloros llanto hasta una explosiva carcajada
Uno nunca sabe cuando será la última vez
así que, hay que disfrutar cada micro sección de la misma...
Sufre tu dolor como el último
Disfruta tu risa como la primera
Porque al final...
Todo lo que eres, es todo aquello que has hecho.
One did not ask to born
One just ask to live
Then one never spect to die...
We hold life as if it belongs to us
When in fact, We are just carrying lended energy
When in fact, that is what We are
Just lended energy...
One and each of us
We are an oportunity in a million
We are millions of oportunities...
So, don't waste yourself.
Everything in life is a deluxe article
From a painful crying to an explosive laughing
One never knows when is going to be the last time
So, gotta enjoy every single micro section of it...
suffer Your pain as the last one
And enjoy the laughing as the first
Because in the end...
Everything You are, is just everything You've done.
Uno no pidió ser procreado
Uno no pidió nacer
Uno solo pide vivir
Entonces uno nunca espera morir...
Nos aferramos a la vida como si nos perteneciera
Cuando en realidad, solo llevamos energía prestada
Cuando en realidad, es eso lo que somos
Energía prestada...
Todos y cada uno de nosotros
Somos una oportunidad en un millón
Somos millones de oportunidades...
Así que, no te desperdicies.
Todo en la vida es un artículo de lujo
Desde un doloros llanto hasta una explosiva carcajada
Uno nunca sabe cuando será la última vez
así que, hay que disfrutar cada micro sección de la misma...
Sufre tu dolor como el último
Disfruta tu risa como la primera
Porque al final...
Todo lo que eres, es todo aquello que has hecho.
jueves, 5 de enero de 2012
Chico Viejo
Edificios acobijados por hollín.
Aceras que reflejan a quienes las transitan.
Una ciudad oscurecida por su gente.
Los peatones transitan ajenos entre sí.
Cielo empañado de deseos de lágrimas.
Una atmósfera que refleja a la desidia.
Respiramos esta insinceridad sincera.
La juventud se asfixia en el ambiente.
Se derrite el hielo en un vaso a la luz del sol
Es bajo este sol en donde abunda el frío
Es un tema lo corpóreo y lo tangible
Es otro tema lo que concierne al interior
Es una cosa lo que se ve y se palpa
Otra diferente la que sientes y no ves
La materia de lo que crees que sabes
Podría no coincidir con lo que sabes creer.
En este mundo, colorido ante lo indolente
En esta sociedad, musical ante lo inflexible
En estas tierras, tan llenas de lo baldío
En estos espacios, donde se comparte el egoísmo
Yacen calles, caminos y callejuelas
Carreteras, avenidas y trasversales
Escaleras, aceras, asfalto y senderos
Que transita el chico viejo gastando sus suelas.
Levantando el polvo cuando anda
Y se ve al polvo cubrir a la vida
Es la vida entonces la que cubre a su mente
Es entonces su mente la que cubre al polvo
Todo se ve raído y desgastado
Cada cosa en la vida se aprecia sepia
Los sonidos se han vuelto remedos de alegría
Los sabores y olores se han hecho grises.
Ya nada sorprende y nada se espera
Predecible, previsible, prescindible
Todo perdió motivo excepto la nada
La nada ganó un por qué para todo
Todo se ha vuelto nada adentro
Afuera la nada se volvió un todo
No es ni una partícula de lo que podría ser
No vale, no importa, no afecta, no ama.
Estos dominios, con su agresividad pasiva
Han vuelto un lujo el estar y el ser
El tiempo ha devorado su espíritu
Su fe habita en el estómago de la vida
El amor se disolvió cual sal en el agua
No hay mucho mas por hacer
Queda muy poca cosa que vivir
Estoy cansado...
Mi juventud se asfixia en el ambiente,
respirando esta insinceridad sincera.
En esta atmósfera que refleja a la decidía,
Bajo el cielo empañado en deseos de lágrimas
Donde andan peatones que circulan ajenos entre sí
En esta ciudad oscurecida por su gente
Que descansa sobre aceras que reflejan a quienes las transitan
Ante edificios acobijados por el hollín
Camino yo: el chico viejo.
Aceras que reflejan a quienes las transitan.
Una ciudad oscurecida por su gente.
Los peatones transitan ajenos entre sí.
Cielo empañado de deseos de lágrimas.
Una atmósfera que refleja a la desidia.
Respiramos esta insinceridad sincera.
La juventud se asfixia en el ambiente.
Se derrite el hielo en un vaso a la luz del sol
Es bajo este sol en donde abunda el frío
Es un tema lo corpóreo y lo tangible
Es otro tema lo que concierne al interior
Es una cosa lo que se ve y se palpa
Otra diferente la que sientes y no ves
La materia de lo que crees que sabes
Podría no coincidir con lo que sabes creer.
En este mundo, colorido ante lo indolente
En esta sociedad, musical ante lo inflexible
En estas tierras, tan llenas de lo baldío
En estos espacios, donde se comparte el egoísmo
Yacen calles, caminos y callejuelas
Carreteras, avenidas y trasversales
Escaleras, aceras, asfalto y senderos
Que transita el chico viejo gastando sus suelas.
Levantando el polvo cuando anda
Y se ve al polvo cubrir a la vida
Es la vida entonces la que cubre a su mente
Es entonces su mente la que cubre al polvo
Todo se ve raído y desgastado
Cada cosa en la vida se aprecia sepia
Los sonidos se han vuelto remedos de alegría
Los sabores y olores se han hecho grises.
Ya nada sorprende y nada se espera
Predecible, previsible, prescindible
Todo perdió motivo excepto la nada
La nada ganó un por qué para todo
Todo se ha vuelto nada adentro
Afuera la nada se volvió un todo
No es ni una partícula de lo que podría ser
No vale, no importa, no afecta, no ama.
Estos dominios, con su agresividad pasiva
Han vuelto un lujo el estar y el ser
El tiempo ha devorado su espíritu
Su fe habita en el estómago de la vida
El amor se disolvió cual sal en el agua
No hay mucho mas por hacer
Queda muy poca cosa que vivir
Estoy cansado...
Mi juventud se asfixia en el ambiente,
respirando esta insinceridad sincera.
En esta atmósfera que refleja a la decidía,
Bajo el cielo empañado en deseos de lágrimas
Donde andan peatones que circulan ajenos entre sí
En esta ciudad oscurecida por su gente
Que descansa sobre aceras que reflejan a quienes las transitan
Ante edificios acobijados por el hollín
Camino yo: el chico viejo.
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